La categoría también reconoció a otras tres compañías que se internacionalizaron.

La categoría “Saliendo al mundo” distinguió a aquellas compañías que dan sus primeros pasos en el terreno de la exportación y que recientemente lograron la internacionalizar de alguno de sus productos o servicios. Entre los finalistas se encontró Kingberry, una firma fundada por Carlos Pablo Ballazini y Francisco Estrada que se dedica a distribuir productos frescos y congelados. Se destaca principalmente por la producción de arándanos, frutillas y limones que viajan a varios rincones del mundo. Desde 2017, con la idea de internacionalizar la empresa, los socios de Kingberry formaron parte del desarrollo de una compañía en Estados Unidos, el principal mercado para sus productos. La firma fue creada en 2005 en la provincia de Tucumán, con la idea de producir y exportar arándanos frescos.

Actualmente opera 120 hectáreas en la zona y cuenta con capacidad de procesar el 100% de la fruta producida. También presta servicios de empaque y acondicionamiento para otros productores. Entre sus certificaciones se encuentra la de fair for life, que distingue el comercio justo, una de las primeras para arándanos argentinos.
Juan Boglione (Ovobrand) Fuente: LA NACION – Crédito: Fabián Malavolta

Otra de las finalistas fue Ovobrand, una organización dedicada a la producción de huevos y ovoproductos a partir de proteínas de origen vegetal. Fue creada en 2008 y se destaca por ser una empresa que, mediante un complejo proceso biotecnológico integrado, convierte la proteína vegetal (granos) en proteína animal (huevo).

Posee la tecnología necesaria para obtener ovoproductos de utilización en las industrias alimentaria, cosmética y farmacéutica. Gran parte de sus productos son enviados al exterior. Hoy, un 60% de la producción (250 toneladas de huevo en polvo por mes) se destina a mercados como Sudáfrica, Japón, Rusia y también a otros países de América Latina.

C. Díaz Cabrejas (Syntex) Fuente: LA NACION – Crédito: Fabián Malavolta
La última entre las finalistas fue Syntex, una firma que produce y comercializa principios activos de origen biológico y semisintético para la industria farmacéutica y especialidades veterinarias. La empresa es referente internacional en heparina, un anticoagulante, y constantemente desarrolla nuevas aplicaciones en medicina humana y veterinaria.

La compañía nació en 1935 y actualmente cuenta con 260 colaboradores en su planta. La empresa exporta desde fines de los años 50 a mercados como Japón, Europa, Estados Unidos, Canadá, Nueva Zelanda, Australia, México y casi toda Sudamérica y Sudáfrica. “Hoy seguimos abriendo mercados en el sudeste asiático, Rusia y Medio Oriente”, comentaron desde la empresa, y añadieron: “El acceso a líneas de crédito competitivas de preexportación contribuiría a la industria nacional”.

Por:
Olivia Goldschmidt